martes, octubre 28, 2008

Tiendo la mano, inútilmente, hacia aquellos momentos. Veo el pasillo, las habitaciones,el papel pintado de las paredes, e intento recuperar aquellas personas y traerlas aquí y ahora.
Una estola de zorro apolillada, un quimono de seda pasado, niñas que ríen de su propia risa. Santana en el tocadiscos, vasos de coca cola. Carreras, gritos, miradas en el espejo.
Él, sentado en el sillón del salón. Él, oscuro, desconocido. Una y otra vez, la aguja sobre Mrs. Robinson. Una y otra vez, repetida, obsesivamente. Patadas, arañazos, tirones de pelo, permitidos, en vez de caricias, besos y susurros.
Se iba. Chaquetón negro de marino, botas negras Yo daba la vuelta al disco. Scarborough fair. Una y otra vez, repetida, obsesivamente.Añoranza, deseo, ilusión.
La realidad...La ficción....
Lástima haber estudiado francés en vez de inglés.

2 comentarios:

C. dijo...

Hola mi madrileña amiga, hace rato que no te veo.

Saludos!

lagave dijo...

Se me complicó la vida, amigo, se me complicó.Cambio de trabajo, primero, y ahora...Me acuerdo de ti y de Joaquín (tengo 21 Joaquines, y una de ellas me mira y me dice "vos" e aquella manera!!)
Y ahora, mi madre...La vida es tan frágil, y nosotros creyéndonos que la tenemos cogida por las pelotas. Y te crees que sabes algo ya de ella y de ti, y descubres que apenas asomaste la nariz por el agujero. Sólo sé que soy imbécil, y mala persona, y que tengo que crecer tanto que no sé si me alcanzará el tiempo. Un beso enorme, Tián.