Me confundes.
Siempre has tenido ese poder de enredarme en tu tela de araña. Siempre.
Menos hoy.
Cuando te miraba veía las cartas infinitas que te envié con los infinitos poemas que te dediqué.
Y que tú....¿leíste? Y si acaso lo hiciste, ¿alguna pequeñita fibra tuya se estremeció?
Creo que sí y no.
Sí que leíste, pero....más, NO.
Un año de mi vida, quizá el más decisivo. Donde da la vuelta el aire.
Allí estuviste tú.
"Tú que todo lo llenas, tú que todo lo ocupas"
Y luego "te perdiste con los últimos rayos de sol de la tarde" .
Te perdí. Porque yo quise. Porque no te tenía.
Es tonto perder algo que no se tiene, pero a veces, pasa.
Y ahora oigo que me quieres....
Qué me quieres?Qué cosa mía quieres?
"Puedo recordar los versos más tristes esta noche"
y los más ilusionados, también.
Pero no puedo escribirte nada más que esto, para que tú sepas y yo me entere de que
no me confundes.
4 comentarios:
A mí también me confunden los domingos por la tarde, las promesas incumplidas de los amores de televisión, y me encanta el verso de Neruda.
Pero por suerte, mañana es lunes.
Un abrazo.
Entre domingo por la tarde y la mañana del lunes, voy casi casi arrastrándome. A medida que pasan los días, la postura mejora. Cosas del tiempo!
Odio los amores de película que crean tantas falsas expectativas.
Me encanta Neruda. Y Cernuda, y Salinas.
Otro abrazo!
Con Cernuda pasaría cada domingo por la tarde.
Yo con Salinas, pero tendría grandes dudas, porque con Benedetti también me gustaría.
Angustiosa indecisión....
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